El enfoque diferencial parte del reconocimiento de que todas las personas tienen derecho a acceder a un servicio público inclusivo, libre de discriminación y verdaderamente accesible. Aplicarlo en la atención ciudadana significa eliminar barreras, valorar la diversidad y reconocer a cada persona como sujeto de derechos.
Por eso, en la administración del alcalde Carlos Fernando Galán trabajamos para ofrecer una atención cercana y respetuosa, basada en la escucha activa, la empatía, la paciencia y la entrega de información clara y oportuna. Este enfoque también nos permite comprender que factores sociales, culturales y emocionales influyen en la forma en que las personas se relacionan con lo público y solicitan los servicios.
Las víctimas del conflicto armado, por ejemplo, pueden presentar reacciones emocionales derivadas de experiencias traumáticas. Escuchar sin juzgar, evitar estereotipos y conocer las rutas de atención que restablezcan sus derechos es clave para una atención digna.
Por su parte, las personas campesinas tienen formas propias de nombrar sus territorios, tradiciones o medios de comunicación. Atender con enfoque diferencial significa reconocer su identidad, indagar por información clave para ubicar sus lugares de residencia y ajustar los canales de contacto para garantizar que reciban las respuestas a sus solicitudes.
Cada persona cuenta y cada interacción con la ciudadanía es una oportunidad para reafirmar nuestro compromiso con el respeto, la equidad y la transformación social desde el servicio público porque aquí sí pasa.

